miércoles, 2 de febrero de 2011

HERMANOS MARTINEZ - Amor en mis montañas

Avenida la Playa 1947. Medellin.
Tranvia subiendo frente al Teatro Junin.
Foto de National Geographic Magazine.


PACANDE
COPLAS SANTANDEREANAS
 RECUERDOS VIEJOS
ALEGRIA TOLIMENSE
TORBELLINO No. 2
EL TRAPICHE
AMOR EN MIS MONTAÑAS
 OJO AL TORO
TRIGUEÑITA
BRISAS DEL FONCE
EL PAÑUELITO DE ALGODON
EL DELANTAL DE LA CHINA





AMOR DE MIS MONTAÑAS


EL TRAPICHE


RECUERDOS VIEJOS


Estas canciones de Jaime y Mario Martínez a una Colombia musical  deben ser consideradas como uno de los más valiosos acontecimientos en nuestra vida artística de la década última, como que desde un principio la canción vio automáticamente en ellos a dos de los más puros cancioneros, a un dueto sin contaminación alguna de injerencias musicales extrañas.

La música y especialmente nuestra música telúrica esta en ellos, en su sangre santandereana, pues son hijos del maestro Camilo Martínez, el “viejo”,  ilustre director de tantos músicos y pequeñas orquestas de ancho renombre y dura fama en nuestro país.

Sin llegar ninguno de los dos al cuarto de siglo, -Jaime con 23 y Mario por los 24 calendarios-en el 57 hicieron presentaciones radiofónicas y en el 59 fueron llamados a los programas estelares en Colombia como “mano a mano” musical donde participaron con Jaime Llano González , el gran señor de la música colombiana. Aclamación tras aclamación, los Hermanos Martínez han conquistado en su breve pero poderosa carrera con una serie de primeros puestos y gratas notificaciones de “Fuera de concurso” en importantes eventos músico-folclóricos del país.

Artistas de amplio territorio, Jaime y Mario se distinguen también especialmente como compositores, pues mientras el primero es el autor de "Nidia , "Brisas del Fonce y "Trigueñita ". Mario es el "responsable de ese par de bambucos antológicos, "Amorcito de mi Alma y "Llanerita”. Los Hermanos Martínez no sólo integran este excepcional dueto vocal, sino que Jaime como magistral solista del violín. -no sólo en lo popular sino en lo clásico-, y Mario como admirable solista del tiple, han fortificado su basamento artístico hasta límites inmellables.

Campean en su triunfo artístico las canciones de los más connotados autores colombianos, especialmente del Maestro José A. Morales, cima alta y a la vez cálida de la canción nativa y quien mucho tiene que ver con la posición privilegiada de los Hermanos Martínez en nuestra popularidad, pues en ellos ha volcado las grandes dosis de su fe. Y son algunas de las más brillantes tonadas del Maestro Morales la que estos grandes intérpretes, -también y naturalmente artistas de SONOLUX-, han sumado orgullosamente a éste álbum, que nos trae las voces, personalidad y constancia en la música de los Hermanos Martínez, que es la propia música, —humus amoroso-, de Colombia.

NOTA: Gabriel Cuartas Franco

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